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Apartan al juez Calcagno de la causa Garrido, el joven muerto en calabozo
Garrido apareció ahorcado en calabozo
Bariloche (ADN).- La Cámara Segunda del Crimen resolvió apartar al juez de Instrucción, Ricardo Calcagno de las actuaciones en las que se investiga la muerte de Guillermo Garrido, el joven de 24 años que murió en un calabozo de la Comisaría 12 de El Bolsón en enero pasado y que días atrás peritos bonaerenses revelaron que el joven tenía una herida en la nuca descartándose la posibilidad de suicidio, como lo calificó el juez de inmediato.
El apartamiento de Calcagno responde a la aceptación de la recusación planteada por el fiscal oficial Eduardo Fernández quien cuestionó que el juez emitió opinión sobre el fondo de la cuestión al afirmar que descartaba la participación de terceras personas y aseverar que la muerte de Garrido “se debió a su propia determinación y accionar”. Y además apuntó a una “falta de imparcialidad y pérdida de objetividad” del magistrado.
Calcagno había archivado la causa pero ahora la Cámara revocó esa medida y ordenó la remisión de las actuaciones al juez subrogante.
La Cámara consideró que el juez “ha perdido su neutralidad en la causa en aras a lograr la unicidad de criterios investigativos. Se advierte un quebrantamiento del principio de imparcialidad”.
Agregan que “no se advierte flexibilidad para aceptar hipótesis de ocurrencia fáctica distinta lo que impide el progreso de la investigación. Se observa una suerte de litigio con el Fiscal, lo que funda la sospecha de parcialidad”.
En esta causa la semana pasada el diario Página 12 reveló un informe de peritos bonaerenses solicitados por el Ministerio Público donde se reveló que Garrido recibió un fuerte golpe en la nuca antes de morir.
La Asamblea Permanente por los Derechos Humanos de la Comarca Andina cuestionó en un documento público que “la verdad no llegó desde la Justicia rionegrina, que dictaminó suicidio y archivó la causa. Los informes periciales de los Peritos bonaerenses, a los que se recurrió como alternativa y que se acaban de publicar, son concluyentes. Ya no hay duda posible: No fue un suicidio como pretendía la burda versión policial, aceptada por el Juez Calcagno. Coquito fue asesinado en un calabozo de la comisaría de El Bolsón, a escasas dos horas de su arresto por un incidente menor de tránsito”.
Apuntaron a que la Justicia “es lenta, ciega, reticente, pero llega, y, en ocasiones, la representan con una espada en la mano. Los culpables del asesinato han quedado al descubierto. El comisario, el subcomisario y los agentes de turno el día 13 de enero del 2010, en la Comisaría de El Bolsón deben cesar ya en sus funciones y llevados a los tribunales y a la cárcel, tal como corresponde”.
La APDH apuntó también a que deben responder por el crimen “los funcionarios responsables de estos siniestros personajes policiales en el Gobierno rionegrino” y “otros que participaron o entorpecieron la investigación, entre los cuales La Fiscalía de El Bolsón, que no investigó como correspondía, los peritos barilochenses, que hicieron la autopsia falsa y el Juez actuante, quien archivó la causa. Ellos aparecen ante la opinión pública como cómplices en mayor o menor grado y deberán deslindar responsabilidades. Las autoridades del Hospital local deberán también explicar por qué no retuvieron a Garrido después del accidente y permitieron, si demostraba algún grado de alcohol, como se pretende, que lo llevaran detenido”.(ADN)
Enrique Carlos
