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Muere vecino de Lago Puelo en violento accidente vehicular entre un micro y una camioneta
La víctima conducía el rodado menor. Producto de las severas lesiones, murió en el acto. El accidente ocurrió en el kilómetro 2005 de la ruta 40, en Villa Mascardi. Los dos choferes del micro resultaron con heridas, uno de ellos con múltiples fracturas. Mientras que una mujer embarazada, pasajera de esa unidad, fue trasladada por prevención a un centro asistencial, con golpes y en estado de shock.
La víctima fue identificada como Joaquín Pascual Morado, de 58 años, oriundo de la localidad de Lago Puelo, aunque en la actualidad residía en el paraje Entre Ríos, ubicado a unos 6 kilómetros de ese lugar.
Los primeros en arribar al accidente fueron guardaparques de una seccional cercana, quienes se repartieron las tareas iniciales de rescate. Uno de ellos fue hasta la camioneta y percibió que el conductor de la Ranger aún tenía un tímido pulso, aunque murió a los pocos segundos.
Los vidrios de la unidad de transporte, que trasladaba 17 pasajeros más los dos choferes, estallaron y provocaron heridas cortantes a los conductores, aunque uno de ellos sufrió también una fractura expuesta en el brazo derecho.
El primero de ellos, quien resultó menos perjudicado, fue identificado como Jesús Pérez, y fue trasladado en primer término, debido a que no estaba aprisionado.
Su colega, en cambio, debió aguardar varios minutos debido a que los bomberos debieron realizaron maniobras con herramientas neumáticos para poder liberarlo ya que estaba atrapado entre los plásticos del torpedo de la unidad.
Se trata de Emilio Rojas, quien sufrió una fractura expuesta en un brazo y también lesiones óseas en las extremidades inferiores.
Una de las pasajeras, quien está embarazada, fue la única trasladada a un centro asistencial en ambulancia, aunque de manera preventiva ya que tuvo golpes, producto del movimiento brusco tras el impacto.
El resto de los pasajeros fue abordado en un micro de la empresa Crucero del Norte, cuyos conductores sin dudarlo se detuvieron en el lugar y los trasladaron hacia Bariloche.
La mecánica
Morado circulaba a bordo de su utilitario en dirección a El Bolsón. La ruta presentaba, en varios sectores, grandes charcos y lagunas que dificultaban la conducción. De acuerdo a las primeras especulaciones, el poblador del Paralelo 42 habría invadido el carril contrario, impactando frontalmente con el micro, que circulaba en sentido opuesto.
La brutalidad del choque permitiría analizar que al menos el utilitario circulaba a varios kilómetros por hora, aunque por el momento no se descarta ninguna hipótesis.
Tras el impacto, el chofer del micro realizó una brusca maniobra aunque no logró controlar la unidad, que cayó a la banquina y se deslizó varios metros hacia una parte boscosa, que ayudó para detener el avance. La Ford Ranger habría dado varios giros y quedó con su parte frontal apoyada en el guardarail, apuntando hacia el lago.
El rescate
Bomberos del cuartel Centro, policía de Río Negro (del destacamento Mascardi y del Cuerpo de Seguridad Vial), Gendarmería Nacional y Parques Nacionales fueron los organismos que aportaron personal y equipos para la emergencia, logrando entre todos un trabajo en conjunto que fue positivo.
Mientras que perduró la liberación del chofer herido y luego de la víctima fatal, el tránsito se mantuvo interrumpido en el lugar, generando filas en ambos sectores que superaban los 5 kilómetros.
La víctima
Morado volvía desde Bariloche hacia el paraje donde vivía. Llevaba alimento para perros y otras cosas que había adquirido en la ciudad, además de estar acompañado por su can, que sólo recibió algunos golpes y quedó en custodia de algunos de los miembros de las fuerzas de seguridad que trabajaron en la zona. Si bien se habló que era un vecino de Puelo, el hombre desde hace varios años ya no vivía allí. Ahora lo hacía en el paraje Entre Ríos, vinculado más a El Bolsón que a la localidad chubutense. De acuerdo a datos que logró este medio, el vecino se dedicaba a realizar trabajos en un aserradero de su propiedad, mientras que anteriormente se desempeñó también en una dulcería muy conocida de la zona.
El falso cronista
Un hombre tomó gran cantidad de fotos en el lugar, estorbó la labor de los rescatistas y actuó de manera irresponsable durante la emergencia, aduciendo ser un cronista de “El Cordillerano”. De hecho, para poder acercarse al sitio del accidente, inventó que era un periodista de este medio, aunque en realidad es un desconocido que utilizó falsamente el nombre de este diario para tomar fotografías.
Radio Malon
