El DPA revisa deudas de agua de productores
Apuntan a chacareros de varias localidades.
Hay facturas impagas de los últimos 20 años.
VIEDMA (AV).- El Departamento Provincial de Aguas (DPA) puso en marcha una estrategia de recuperación de deudas contraídas por chacareros de Río Colorado, Catriel, General Conesa, Valcheta y El Bolsón en concepto de canon de riego. Las obligaciones, aun no cuantificadas, y que heredó la actual gestión están vinculadas a la facturación de los últimos 10 años.
El aviso de cobro fue tomando forma con la revisión de facturas impagas de los últimos 20 años, es decir desde que Agua y Energía traspasó los servicios de riego a la Provincia de Río Negro; confirmó a "Río Negro" el superintendente del DPA, Juan Luis Gardes.
El aviso de cobro está a cargo del gerente comercial de Servicios No Consorciados, Wálter Bini, quien inició su gestión transmitiendo los lineamientos del operativo a los responsables de las delegaciones del organismo en las mencionadas localidades.
Entre los planes de pagos previstos, se ofrece a los chacareros cancelar compromisos hasta en 36 cuotas con un anticipo del 20 por ciento de la deuda.
Respecto de la nueva política comercial, Gardes explicó que "una definición que hemos tomado es reclamar la deuda no prescripta, de manera razonable, y luego de todo una discusión legal incluso con Fiscalía de Estado, llegamos a la conclusión de que en los efectos prácticos, debemos buscar que por lo menos nos paguen los últimos 10 años".
Apuntó que "en teoría había que solicitar el pago desde el '92, aunque ajustándonos a la normativa, se puede intimar por una década para atrás".
El funcionario aclaró que la operatoria que se lleva a cabo significa que "contemplaremos la problemática del sector", sin embargo "queremos cobrar el canon para seguir manteniendo los sistemas (no transferidos a consorcios) y eso sale plata, no nos alcanza" pues "este servicio es como si fuera la electricidad, hay que pagarlo".
Agregó que entre los atrasos y el presente "el agua es considerada pública, sin embargo puesta en una acequia tiene un costo, y si bien atendemos la situación por la que atraviesa el sector, resulta razonable que quien tiene un lucro para utilizarla en un frutal o maizal pague algo sobre eso".
Luego aclaró que "no pretendemos recaudar porque somos de Rentas, sino que formamos parte del sistema productivo, los recursos del Estado son limitados" y por lo tanto "necesitamos plata para mantenerlos".
Gardes puso como ejemplo lo que viene ocurriendo en Río Colorado. Allí se facturan 850.000 pesos al año, con un valor de 151 pesos la hectárea el año, y como contrapartida, el nivel de ingresos para el DPA por cuotas impagas representan apenas el 30 por ciento anual, unos 270.000 pesos.
El directivo añadió que la explotación del sistema alcanza una friolera de tres millones de pesos anuales. En consecuencia, la preocupación estatal tiene dos aristas: el desfinanciamiento y las dificultades para cumplir con el mantenimiento del sistema.
Junto con la tarea que despliega Bini, el DPA está modernizando los sistemas informáticos y allanando las dificultades en la cuestión operacional, y así cumplir con las expectativas de recuperar acreencias.
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