10/6/14

Lago Puelo: una mujer pasó la noche perdida en el bosque

Foto archivo

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SOCIEDAD

Lago Puelo: una mujer pasó la noche perdida en el bosque

Soportó nevisca y temperaturas bajo cero. Había ido a buscar hongos para alimentarse. Ella tiene 60 años.

Una odisea de varias horas tuvo como protagonista a una mujer de 60 años, residente en Lago Puelo, quién pasó la noche perdida en el bosque, soportando lluvia, nevisca y temperatura bajo cero, hasta que en la mañana del miércoles pudo llegar hasta la estancia Las Mercedes, en el paraje El Coihue (ejido de Epuyén), donde la socorrieron.

"Se encuentra en buen estado de salud, asistida por la gente del campo, aunque bajo los efectos propios del shock sufrido por tantas horas a la intemperie", detalló al mediodía de ayer el director de Defensa Civil del noroeste del Chubut, Mario González, a cargo del operativo de rastrillaje que recién culminó cuando se recepcionó la noticia de la aparición de Blanca Buenahora.

Según detallaron más tarde su hijo y otros familiares, la mujer partió acompañada por amigos hasta la zona rural con la premisa de recolectar hongos de pino, que a esta altura del año abundan en los pinares del lugar.

Al parecer, se alejó del grupo y cuando comenzó a caer la noche (18,30 aproximadamente), al intentar regresar hasta el vehículo que la aguardaba en la ruta provincial 71, perdió el rumbo y se metió aún más en el bosque.

Al ver que no volvía, sus acompañantes optaron por regresar a Lago Puelo y notificar a su familia. Su hijo avisó a la policía y junto a un amigo y un uniformado fueron hasta El Coihue y salieron en su búsqueda, llamándola a los gritos y alumbrando con linternas las posibles salidas al camino. Este trabajo se extendió hasta casi las 3 de la madrugada y al ver que era infructuoso también optaron por volver y esperar que amanezca.

En tanto, la extraviada deambuló por el bosque sin rumbo fijo durante toda la noche, en medio de las inclemencias climáticas y abrigada solo con una campera.

Cerca de las 9, cuando la claridad se lo permitió, atinó a buscar una salida montaña abajo, hasta que se topó con un camino vecinal que une la ruta 71 con la laguna Las Mercedes. Luego de andar algunos kilómetros se encontró con un trabajador de la estancia, quien la llevó hasta la casa principal, donde la repusieron de la larga jornada de frío, la alimentaron y avisaron a las autoridades.

El dato anecdótico es que cuando sus familiares llegaron a buscarla, aún tenía en sus manos la bolsa de hongos recolectados.

Agencia El Bolsón