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HOY SE REÚNEN LAS ÁREAS MUJER DE LA COMARCA VIRCH VALDÉS EN PUERTO MADRYN
Implementan protocolos de intervención en casos de violencia de género
Hoy comienza una ronda de reuniones entre las referentes de las áreas Mujer de la Comarca Virch – Valdés, que será repetido en la Comarca Sur el día 12, en la Meseta Central el 19 del corriente mes y en la Comarca Andina los días 22 y 23 de noviembre.
Estas reuniones tienen como objetivo implementar protocolos de intervención en casos de violencia de género, así como también dar difusión a la existencia de la línea gratuito 102 para denunciar abusos, violencia, trata de personas, problemáticas relacionadas a la niñez y adolescencia, ya que actualmente es utilizada sólo para denunciar cuestiones ligadas a la trata de personas.
En este sentido, El Diario dialogó con Viviana Haro, directora provincial de Equidad y Género, quien sostuvo que “en estos encuentros de trabajo interno vamos a delinear el protocolo de intervención, para que todas sepamos qué medidas hay que tomar ante un caso de violencia, cuáles son los tipos de violencia que nos marca la Ley 26485 de Violencia Contra las Mujeres, y cómo abordar según se trate de violencia física, psicológica, laboral, económica, sexual, porque no es lo mismo un caso de violación que uno de violencia intrafamiliar, es necesario que sepamos qué circuitos hay que aplicar en cada localidad, con la Comisaríade la Mujer, cómo deben denunciar y qué cuidados hay que tener, cuáles son los datos que se necesitan, qué fotos deben presentarse, porque a veces lo que pasa es que falta algo para que se pueda llevar el caso a la Justicia.
Este primer encuentro es para diagramar nuestro trabajo y después cada localidad deberá avanzar de acuerdo a su propia realidad. También vamos a ver con qué recursos contamos en cada región de modo de articular y poder dar solución a lo urgente, necesitamos de la participación y articulación de la Casa de la Mujer, de Policía, de Salud que brinda los reportes médicos en los casos de violencia y abusos, es un trabajo que hay que hacer entre todas las instituciones y con el protocolo podemos delinear cómo hacerlo”.
Línea para denunciar
Otro de los temas que serán eje del encuentro de trabajo se refiere a la línea telefónica gratuita 102, “falta difusión porque la gente cree que es únicamente para denunciar casos de trata de personas y en realidad se puede utilizar por temas de violencia, niñez y adolescencia también, hay que afinar el trabajo” y agregó que “hoy la línea la utiliza únicamente el CONAF (Consejo Provincial de Niñez, Adolescencia y Familia) pero podemos utilizarlas las áreas de la Mujer, en este encuentro vamos a tratar de que se sepa y se difunda que se puede dar otra utilización a la línea telefónica”.
Por último, Haro señaló que en estos once meses desde que se creó la Dirección Provincial de Equidad y Género, estuvieron abocados a la realización del diagnóstico de la situación en la provincia, los equipos se capacitaron a través de una serie de jornadas que se desarrollaron en distintos puntos de la provincia, por lo cual “ahora tenemos que empezar a intervenir en lo concreto, aplicar la normativa que tenemos y que es muy valiosa”.
Una cuestión de derechos
La Convención Interamericana para prevenir, sancionar y erradicar la violencia contra la mujer, más conocida como “Convención de Belem Do Para”, realizada en Brasil en 1994, reconoce explícitamente que la violencia contra las mujeres constituye una violación a los Derechos Humanos y establece dos principios básicos, el primero de ellos es el reconocimiento de la violencia contra las mujeres como una violación a los derechos humanos y las libertades fundamentales; el segundo es el reconocimiento que este tipo de violencia es una ofensa a la dignidad humana, que se origina en las relaciones de poder históricamente desiguales entre varones y mujeres y trasciende todos los sectores de la sociedad, independientemente de su clase, raza o grupo étnico, nivel de ingresos, cultura, nivel educacional, edad o religión.
En la Cuarta Conferencia Mundial sobre la Mujer en 1995 en Beijing, las mujeres lograron que la violencia contra ellas sea reconocida como una violación a los derechos humanos de las mujeres y un tema de salud publica, y de este modo que se instara a los Estados a legislar y formular políticas para erradicar este flagelo.
Es decir, han pasado casi dos décadas desde que los tratados internacionales, convenciones, pactos, leyes y demás, han reconocido que la violencia de género está instalada en la sociedad, que no se trata de hechos aislados que afectan el ámbito privado sino que es una cuestión de salud pública, una problemática social que afecta a más de la mitad de las mujeres. De allí la importancia de avanzar en concientización y acercar los dispositivos hacia las mujeres, hacerles más fácil el circuito de denuncia y de salida de ese espiral de violencia, que también implica una violación de derechos humanos.
Enrique Carlos
