15/9/09

Historia de un autoclave fabricado en El Bolsón para Bariloche.

Abultado e innecesario gasto en traslado de patógenos

Bariloche en dos años envió a General Roca más de 100 mil Kg de residuos patógenos, con un gasto mayor a los 300 mil pesos. Prohibida la incineración por Carta Orgánica, se compró un autoclave que nunca fue retirado de El Bolsón. Hace un año se anunciaron obras para su puesta en funcionamiento en San Francisco IV, pero jamás se iniciaron y se ofreció el predio para la instalación de un cuartel de bomberos. El proveedor pide que lo retiren y anticipó que cobrará por la estadía.

Predio donde debían realizarse las obras, cuando sacaron los hornos pirolíticos

Predio donde debían realizarse las obras, cuando sacaron los hornos pirolíticos

Entre octubre del 2007 y julio de 2009, según resulta de la sumatoria de las resoluciones del Ejecutivo, el Municipio le abonó a la empresa Zavecom, una suma cercana a los 316.150 pesos, por la recolección, traslado y disposición final de los residuos patógenos generados por la ciudad. En total, en ese período, serían al menos 109.508 Kg. El acuerdo con la empresa del Valle fija en 2mil pesos más i.v.a. el viaje de 800Kg, y 2.66 más i.v.a. por cada Kg. excedente.

La metodología implica que el municipio retira de los contribuyentes generadores el material, lo acopia en el Hospital Zonal Ramón Carrillo, y una vez por semana la empresa los retira para someterlos al autoclave que posee en General Roca.

Anteriormente, la comuna incineraba en hornos pirolíticos ese material, pero la falta de mantenimiento de la estructura y los riesgos a la salud y al medio ambiente generaron el rechazo de vecinos del San Francisco IV y de organizaciones intermedias. Allí se anunció y procedió a la compra –a través de un aporte del tesoro nacional- de un autoclave; y el vacío normativo fue cubierto en la reforma de la Carta Orgánica Municipal, donde se estableció “la prohibición del uso y la instalación domiciliaria, comercial e industrial de incineradores de residuos”.

El subsecretario de Servicios Públicos, Miguel Felley, explicó que a diferencia del horno pirolítico, que funciona con fuego, el autoclave trabaja con agua hirviendo y presión, sin producir gases contaminantes.

En septiembre de 2008, el por entonces secretario de Economía, Jorge Temporetti, anunció en el Diario Río Negro que el municipio decidió reactivar la planta de tratamiento de residuos patógenos con la instalación del autoclave adquirido por la anterior gestión, para recuperar el manejo y tratamiento de la basura que se envía a Roca desde hace años. "El autoclave está pago y está en El Bolsón, quien lo fabricó lo tiene, pero tenemos que adecuar el lugar físico para traerlo", dijo a ese matutino hace un año, indicando que la obra "no es tan importante", y que “comenzará en los próximos días para poner el servicio en funcionamiento antes de fin de año”.

Transcurrido un año de aquel anuncio, no sólo no se iniciaron las obras, sino que el edificio donde se instalaría el autoclave fue ofrecido para la construcción de un cuartel de Bomberos para el este de la ciudad.

Por su parte, Felley manifestó que está buscando la autorización para traerlo, y reconoció que el proveedor lo llamó para pedirle que lo retire, anticipándole que le cobraría la estadía del autoclave en sus instalaciones, porque “hace más de dos años que está allá”. Mientras tanto, Bariloche continúa abonado un promedio de 15 mil pesos mensuales para llevar su basura patológica a Roca. (ANB)