La interconexión eléctrica de la Comarca Andina: una historia de contratiempos

Miércoles 03 de Febrero de 2010 21:59

La incorporación de El Bolsón y el Noroeste del Chubut al Sistema Interconectado Patagónico es un tema que lleva muchos años en la agenda pública, pese a lo cual no se han logrado avances significativos. Lo que se pudo hacer hasta el momento es mediante el uso de infraestructura previa, que presenta múltiples deficiencias, visibles muy frecuentemente en cada corte de energía.

Prácticamente diez años (1998-2007) hubo que esperar desde que se proyectó la línea de alta tensión (132 Kva.) desde Futaleufú hasta El Coihue, en el cruce a El Maitén de la ruta 40 Sur. En ese período, múltiples fueron los problemas sufridos por los habitantes del Noroeste del Chubut y de El Bolsón. Los cortes de electricidad fueron persistentes, debido a problemas de fondo en la infraestructura disponible.

Cuando se terminó el tendido de la línea de alta tensión, los problemas persistieron en gran medida y la interconexión no se pudo poner en servicio por la falta de distintos elementos. El más importante retraso fue el de los transformadores de la Estación de El Coihue, que debía rebajar la tensión de 132 a 33. Todo ello fue que la zona Noroeste del Chubut viviera varios años con una Emergencia Eléctrica formalmente declarada.

Paralelamente al avance en el tramo Esquel - El Coihue, fue creciendo un persistente conflicto por el trazado de la línea de media tensión desde El Coihue hasta El Bolsón. Ello se verificó especialmente en la zona de El Hoyo y en El Bolsón, donde los vecinos autoconvocados, habitantes de los barrios de la Zona Sur, hicieron múltiples gestiones para bloquear el trazado propuesto. En un estudio previo al impacto ambiental realizado ya hace varios años, se habían establecido varias alternativas, en orden de prioridad decreciente. La primera, obviamente, era la subterránea, que fue descartada por razones de costo.

Lo curioso de todo esto es que las autoridades terminaron eligiendo la última de las opciones propuestas por los técnicos: ese trazado recorre las calles de los barrios Industrial, Ampliación Irigoyen e Irigoyen, además de otros sectores de la ribera del río Quemquemtreu. La persistente presencia de numerosas columnas de hormigón sin ninguna función, muestra tanto el recorrido que se pretendía hacer y que fue objetado por el vecindario, como la falta de capacidad conjunta para tomar decisiones concertadas y poder llevarlas a cabo.

El principal argumento era la cercanía al río de ese trazado, y la amenaza que representaba la posibilidad de que en un desborde del Quemquemtreu, las aguas carcomieran las bases de las columnas. Además, se insistió en los peligros que podían significar los campos electromagnéticos en una zona densamente poblada y que no cuenta con avenidas anchas por donde los cables puedan pasar alejados de las viviendas.

Ese polémico trazado, que quienes lo eligieron no supieron tampoco defenderlo, quedaría definitivamente abandonado, si se cumple el anuncio de traer la electricidad por la Cuesta del Ternero.

De todas maneras, si una vez llegada la interconexión a El Bolsón, se decide alimentar a Lago Puelo desde aquí, tal como estaba comprometido en el acuerdo interprovincial (EDERSA y Río Negro tenían que hacerse cargo de tendido a Lago Puelo y El Bolsón, una vez pasado El Hoyo) habrá que ver si se siguen usando los mismos cables actuales o si se requiere un tendido especial hacia el Sur, con lo cual podría repetirse el problema ya ocurrido con el recorrido de los cables en su proyectado ingreso a El Bolsón.