30/4/10

Hoy Feriado en la Provincia de Chubut

Hoy es feriado provincial

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El 30 de abril de 1902, un grupo de familias campesinas de origen galés, que habitaba en la Colonia del Valle 16 de Octubre, fueron consultadas por una Comisión de Límites que estudiaba las diferencias fronterizas entre Argentina y Chile, acerca de qué soberanía reconocían ellos sobre las tierras que ocupaban.

Argentina y Chile han tenido en varias oportunidades diferencias respecto de la demarcación del límite que los separa. Uno de los lugares donde esta diferencia fue motivo de largas disputas es la Patagonia.

Chile entendía que la divisoria de aguas debía ser tomada como referencia pues las altas cumbres no era lo suficientemente clara en esta zona. El Valle 16 de Octubre (donde hoy se asientan las localidades de Esquel y Trevelin) así como otros fértiles valles transversales de la Patagonia, quedaban así dentro de territorio chileno.

La determinación de aquellos pobladores fue a favor de la Argentina y si bien difícilmente haya sido la única razón para que Sir Thomas Holdrich haya laudado en favor de la Argentina, con certeza fue un motivo de peso en esta decisión.

Actualmente, cada 30 de abril, las comunidades de Trevelin y Esquel, junto a sus respectivas autoridades y también de la Provincia, se reúnen en el antiguo local de la Escuela N° 18 de Río Corintos, para celebrar un nuevo aniversario del denominado Plebiscito de 1902.

El Pleibiscito de 1902 y los acontecimientos que lo rodearon conforman una historia fascinante que involucra al Perito Moreno, gran conocedor de nuestra geografía Patagónica y serio defensor de los derechos argentinos sobre estas tierras. Una historia de la que poco se sabía y que está llena de interesantes anécdotas.

Durante cuatro años (1.998 a 2002) la Dirección de Cultura de Trevelin llevó a cabo una investigación, a cargo de quien en su momento era su titular, licenciado Jorge Fiori y del escritor y periodista Gustavo De Vera, buscando reconstruir aquellos hechos. Este trabajo fue editado en un libro publicado en coincidencia con el aniversario de los 100 años en el 2002.

Trevelín era un pueblito de 500 habitantes en la Patagonia; un caserío alrededor de un molino que nunca anduvo bien. Trevelín era un poblado mínimo que no hacía quince años que se había asentado. Y cuyos habitantes decidieron, en 1902, que querían ser argentinos.

Había un conflicto de límites con Chile y, frente a los árbitros británicos, los pobladores dieron su opinión. Cien años después, sus descendientes creen que es una decisión para festejar y por eso, a fin de mes, organizaron varios días de actividades.

Chacareros, mineros, herreros y un sastre que buscaban una vida mejor en América. Sabían del frío, pero esto era la Patagonia y se encontraron con un desierto seco, con el viento en carrera libre. Las crónicas de esos inmigrantes cuentan, orgullosas, que se llevaron bien con los tehuelches, que vivían en la región.

En 1885 llegó a Chubut el primer gobernador, teniente coronel Luis Jorge Fontana, y se propuso llevar colonos hacia la cordillera. Ofreció distribuir tierras entre quienes estuvieran dispuestos a empezar de nuevo. Fueron 29 voluntarios y 19 eran galeses. El baqueano se llamaba John Evans. Los colonos llegaron a un valle fértil y lo llamaron, en galés, “Cwn Hyfryd”. Decidieron establecerse a orillas del río Percey y allí fundar la Colonia 16 de Octubre. Era 1888.

En 1897 apareció una disputa de límites con Chile. “El tratado de 1881, dice Gustavo de Vera, uno de los autores del libro 1902. El protagonismo de los colonos galeses en la frontera argentino-chilena establecía como límite las cumbres divisorias de aguas; pero había una zona en la que las altas cumbres están en un lado y la divisoria de aguas, en otro.”

Tomando el criterio que le convenía a cada uno, los dos países reclamaban la tierra. El árbitro era Inglaterra. Ante este país el perito Francisco Moreno presentó sus argumentos en favor de la Argentina. En 1902, el rey Eduardo VII mandó una Comisión de Límites.

“El perito Moreno sabía – dice el libro – que la corona británica se iba a fijar en quién ocupaba las tierras, porque ellos basaban su imperio en el criterio de que la ocupación de tierras da derechos. Por eso, Moreno apoyó la colonización.

Cuando llegó la comisión encontró que había juzgados de paz argentinos, escuelas argentinas… Recorrieron la región preguntándoles a los pobladores en qué país creían que estaban las tierras que habitaban. Y la gente de la zona tenía vínculos institucionales con la Argentina…”

Cuando terminaba abril, la comisión se reunió con la gente de la Colonia 16 de Octubre. Cien años después, los festejos hablan del “plebiscito de 1902”, pero no hay que pensar en una votación con urnas.

Se deliberó y se tomó una decisión. Hay una carta de un representante chileno que cuenta que los pobladores pedían que la cuestión se resolviera pronto, porque tenían pendiente con la Argentina la cuestión de los títulos de propiedad de sus tierras”.

El 20 de noviembre de 1902 se firmó, en Londres, la decisión de los árbitros. Se disputaban 94.000 kilómetros cuadrados. Chile se quedó con 54.000 y Argentina, con 40.000. Pero, dice De Vera, “de esos 94.000 kilómetros cuadrados, solamente 12.000 eran valles productivos. Y de esos, Argentina se quedó con 8.500”.

Allí estaba la Colonia 16 de Octubre, que en 1918 sería rebautizada, también en galés, como Trevelin. Pueblo del Molino.

Fuente: Diario El Oeste