28/12/13

Procesan a tres policías por la muerte de Garrido

Procesan a tres policías por la muerte de Garrido

Las protestas de los familiares de Garrido se hicieron sentir en la ciudad de Bariloche.

Las protestas de los familiares de Garrido se hicieron sentir en la ciudad de Bariloche.

El juez dictó el procesamiento de los uniformados por homicidio culposo.

BARILOCHE (AB).- El juez de Instrucción Martín Lozada dictó el procesamiento de tres empleados de la Policía de Río Negro como supuestos autores del homicidio culposo de Guillermo Garrido, quien Fue hallado ahorcado en el calabozo de la Comisaría 12 de El Bolsón.

Lozada recordó que los tres policías tenían a su cargo el detenido la noche del 13 de enero de 2013, entre las 21:40 y las 22:50, cuando ocurrió el hecho. Consideró que los tres policías "incurrieron en un obrar negligente al omitir el cumplimiento de los deberes a su cargo".

Advirtió en la resolución del procesamiento que se difundió ayer que "violaron el deber de cuidado exigido al dejar al detenido Garrido con un elemento con el que podía atentar contra su vida, tal cual resultó ser el cinturón de un metro de longitud y tres centímetros de ancho, que llevaba entonces colocado en su cintura. Máxime cuando el detenido estaba sumido en un estado de intoxicación alcohólica".

Sostuvo que justamente Garrido usó su cinturón "y se colgó de uno de las rejas del calabozo, operación que le produjo la muerte".

En consecuencia, el juez desestimó la hipótesis de que Garrido había sido víctima de un homicidio en la unidad policial, que impulsaban los familiares como querellantes. De hecho, familiares y vecinos de El Bolsón repudiaron días atrás a Lozada cuando les había adelantado que no había pruebas para sostener la hipótesis de que Garrido fue asesinado.

Lozada valoró la autopsia que realizó el forense Juan Manuel Piñeiro Bauer, quien afirmó que "no se constató signos externos de violencia; se observaron dos líneas equimóticas en la zona del cuello, sobre el lado derecho, compatibles con surco de ahorcamiento?".

Lozada destacó la declaración del médico Gustavo Álvarez, quien sostuvo que el cuerpo de Garrido "tenia marcas en el cuello y en el mentón, que supuestamente es donde apoyó la hebilla del cinto. Las marcas indicaban que efectivamente se había colgado, porque el surco era incompleto".

El médico "afirmó, puntual y concretamente, que el occiso tenia un aliento etílico bastante fuerte. Del resto del examen físico no se observó otro tipo de lesiones. Se consigna que no estaba golpeado".

Lozada indicó que las mediciones efectuadas y el informe pericial encomendado a los especialistas del Cuerpo de Investigaciones Fiscales del Ministerio Público de la Provincia de Salta permiten afirmar que las rejas cumplen "los requisitos de altura para ser utilizadas en suspensión completa, incompleta y de resistencia para soportar el peso de la víctima".

Sostuvo que "ninguna de las declaraciones testimoniales receptadas en sede policial o judicial dan cuenta de la hipótesis homicida".

RÍO NEGRO