9/6/16

IV juicio por delitos de lesa humanidad: Luis Levita (perseguido de El Bolsón)

Últimos testigos por La Escuelita

Declararon por videoconferencia desde Venezuela, México y Bariloche. “Como me gustaba la caza y tenía un fusil me acusaron de terrorista”, dijo una víctima.

Desde Caracas. Cerrando las testimoniales, ayer dio su versión Pablo Hube, detenido en El Bolsón y liberado en Bariloche.

Desde Caracas. Cerrando las testimoniales, ayer dio su versión Pablo Hube, detenido en El Bolsón y liberado en Bariloche. (Matías Subat)

Declaraciones recibidas por viedeoconferencia desde Venezuela, México y Bariloche marcaron la última semana de testimoniales en el IV juicio por delitos de lesa humanidad.

Dos sobrevivientes dieron detalles de los padecimientos de Luis Levita (perseguido de El Bolsón) y de los últimos días en la cárcel de los desaparecidos José Méndez, Javier Seminario, Orlando Cancio y Miguel Pincheira.

Desde Caracas Pablo Hube describió que al librero de El Bolsón, Luis Levita, lo tenían detenido en los pasillos del Escuadrón de gendarmería en Puelo para llevárselo a Bariloche, días después del golpe.

“A mi también me detuvieron; como me gustaba la caza mayor y tenía un fusil, decían que era guerrillero. Yo tenía 20 años y Levita era mayor; hablamos bajito en ese pasillo del escuadrón y después nos llevaron a Bariloche, pero a mi me dejaron preso en la alcaldía, donde me fue a buscar mi papá”, dijo Hube.

Desde Bariloche, Luis Eduardo Rogel describió que era conscripto en 1976 cuando vio a Levita con ojos vendados en la cancha de pelota–paleta de la Escuela militar de Instrucción Anda.

“La cancha estaba en la entrada -del Batallón-, ahí la gente estaba tirada en el piso o sentada; los baños estaban a unos 100 metros y me tocó llevarlo al baño durante una guardia. Lo conocía porque éramos del Bolsón, decían que era por tener libros comunistas”, dijo Rogel.

Leonardo Pino, desde México relató que estuvo preso en la U9 y luego en Rawson con Pincheira, Seminario Ramos, Méndez y Orlando Cancio en 1976.

Era secretario parlamentario de la Legislatura neuquina y tras el golpe militar estuvo detenido.

“Cuando los liberaron nos pusimos muy contentos, pero después con la visita de los familiares supimos que no los liberaron” y que estaban desaparecidos”, señaló Pino.

Agregó que Seminario (a quien conocía por su militancia barrial en el barrio Sapere) estaba convencido que lo matarían. Lo vio muy marcado y con huellas de la tortura, que le describió como salvajes, en “La Escuelita”.

Por la desaparición de Cancio, Seminario, Pincheira y Méndez están acusados de homicidio los militares Oscar Reinhold y Luis Farías Barrera.

RÍO NEGRO