22/8/09

a 27 años de “La Patria Fusilada”

Trelew, 6 de agosto de 1973

Viernes, 21 de Agosto de 2009 18:06

imageMinutos antes del fusilamiento del 22 de agosto de 1972 en la Base Almirante Zar, la historia cuenta que: “El oficial Sosa, que estaba con la pistola lo mismo que Bravo, la sacó y, amartillándola, me apunta la cabeza y me dice: “Si no apoyás la barbilla contra el pecho, te pego un tiro”; yo lo cumplí y él se retiro. Terminó de salir de la celda mía y mandó a formar al pasillo: “Todo el mundo a formar al pasillo”, y ahí fue que salimos, siempre mirando al piso”. Este es un fragmento de las declaraciones de Ricardo René Haidar en la entrevista que hiciera Francisco “Paco” Urondo a los tres sobrevivientes de la Masacre de Trelew y que fuera publicada con el título “La patria fusilada”.
Al relato, Alberto Camps, otro de los sobrevivientes, agregó: “Sí cuando yo salgo, y como mi celda era una de las últimas que formó, soy el último de la fila mirando hacia la salida, el último de la fila de la izquierda, que era, a la vez, la fila donde había menos compañeros, porque estaban en orden Susana Lesgart, Clarisa Lea Place, Alfredo Kohon, Haidar, Mario Delfino y yo, y señaló: “Todavía recuerdo que veía el pullover blanco de Gaita (Pujadas), o sea que esa es toda la visión que tengo yo”.
La mujer que sobrevive a la Masacre era María Antonia Berger y contó a Urondo que “cuando empiezan a disparar, yo veo al gordo ese, que nos había estado cuidando, el suboficial, el de Rosario. Veo que está disparando, y, simultáneamente me siento herida, no me doy cuenta dónde, siento como una quemazón, pero ni dolor ni nada. Mi primera reacción es meterme dentro de la celda, y en ese momento la veo a la Sayo, ahí delante de la puerta, aparentemente muerta, ahí me doy cuenta de que realmente es seria la cosa”.
La historia
El general Agustín Lanusse presidía en aquel entonces el gobierno de facto argentino. El 15 de agosto de 1972 se realiza una fuga del penal de Rawson organizada por militantes de organizaciones guerrilleras detenidos en dicha unidad carcelaria. Sólo logran fugarse seis dirigentes guerrilleros. Los 19 militantes que lograron salir del penal, llegan tarde al aeropuerto de Trelew y deponen sus armas sin ofrecer resistencia. Los militantes detenidos en el aeropuerto hacen una rueda de prensa y piden públicas garantías para sus vidas en presencia de periodistas y autoridades judiciales. Luego son llevados a la Base Almirante Zar donde son alojados en calabozos. Desde ese momento, los detenidos serían hostigados durante todos los días y en cualquier momento. Los obligan a desnudarse delante de todos, hay interrogatorios, provocaciones constantes y teatro de fusilamiento. Hasta que llegó las 3 y media de la mañana del 22 de agosto cuando fueron despertados y sacados de sus celdas por un comando a las órdenes del entonces capitán de corbeta Luis Emilio Sosa y del teniente Roberto Bravo. Los prisioneros fueron ametrallados indefensos y según el testimonio de los tres sobrevivientes, la mayoría estaba herida y fue rematada en el piso. Los fallecidos fueron: Alejandro Ulla, Alfredo Khon, Ana María Villarreal de Santucho, Carlos Alberto del Rey, Carlos Astudillo, Clarisa Lea Place, Eduardo Capello, Humberto Suárez, Humberto Toschi, José Ricardo Mena, María Angélica Sabelli, Mariano Pujadas, Mario Emilio Delfino, Miguel Angel Polti, Pedro Bonet, Susana Lesgart.